viernes, 23 de noviembre de 2012

Identitario y Libertario

El anarquista aristocrático no es un simple individualista. Ancla sus valores en la negación de la democracia. Se levanta contra las normas rígidas del pensamiento y de los comportamientos nacidos de la revolución industrial y defiende los valores aristocráticos de su país. El anarquista aristócrata odia al intelectual, al hipócrita inventor de la democracia. Lo considera iluso, inconsciente. (..) Teoriza mal y es incapaz de actuar según sus propias ideas, las cuales son por otra parte inaplicables. El anarquista de derecha estima, en consecuencia con Friedrich Nietzsche, que el siglo XIX es un siglo de decadencia tanto en lo individual como en lo colectivo. Según él, la espiritualidad desaparece bajo la ilusión del progreso técnico. (…) El anarquista identitario considera que tiene el deber intelectual y moral de rebelarse. Esta oposición a menudo conduce al anarquista de derecha a la violencia: en sus intenciones, en sus escritos pero también en sus actos. Se opone en primer lugar a las instituciones que bajo la fachada de la democracia encarcelan las libertades individuales. De igual modo fustiga la inercia de la colectividad ciega. La noción de pueblo se le presenta como un mito porque lo ve incapaz de pensar y de actuar. Fustiga no solo a los poderosos sino también a aquellos mediocres que dejan hacer, e incluso fabrican, a los poderosos.
El anarquista defiende la idea de que hay que responsabilizar a los hombres. El anarquista identitario propone una filosofía del "yo". Este "yo" debe de ser violento, exigente, lúcido y creativo. Max Stirner considera que el "yo" original es primordial y que hay que serle fiel. Los valores adquiridos durante la infancia estructuran al individuo para siempre y deben ser salvaguardados. El anarquista defiende la aristocracia porque esta es para él la búsqueda perpetua de la excelencia a través de valores como el honor, la fidelidad, el heroísmo... El aristócrata es aquel que sabe armonizar la fuerza de sus deseos y la severidad de sus exigencias. Es más nostálgico con los viejos ideales de la caballería que con la organización institucional. El anarquista identitario intenta presentar una síntesis entre la expresión de la libertad más total y el reconocimiento de los valores superiores al individuo.
Traducción: PintanBastos!

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